Mauricio Macri invito a la Quinta Presidencial de Olivos a Luis Ventura, Angel de Brito y Marcelo Polino. Tres chimenteros que parasitan la televisión de aire argentina.
Recordamos tristemente aquel libro (¿reportaje?, citamos de memoria) de Cornelius Castoriadis donde hablaba del "ascenso de lo insignificante" analizando la perdida de poder del pensamiento critico debido a una especie de falsa, fraudulenta, democratización de los saberes.
"Ya cualquiera opina" diría mi abuela. Y si, eso podría parecer una extensión de la democracia, pero para que así fuera (o al menos lo pareciera), a la quinta Olivos donde accede Angel de Brito deberían ir también Mario Bunge, o Ricardo Bartis. O vos.
El problema no es el gusto por las trivialidades que finalmente son parte de la cultura humana en cualquier época y geografía. Lo que tienen consecuencias es donde las colocamos en la escala jerárquica. Su jerarquía, el recurso tiempo que consume (cuando no otros recursos, mas materiales) no es gratuito. Ni inocuo.
Es como si en el cambalache el presidente eligiera como consejero a Don Chicho y no Napoleon. A Carrera y no a San Martin.
Continuará...
3 comentarios:
Y los trenes? que pasa con los trenes? Anda alguno?
Excelente Pascu. Un detalle: el de Cambalache no es Carrera sino Primo Carnera, un boxeador italiano de los 30 que ya jubilado vino a hacer un show con Karadagian.
Un abrazo!
MichiMiau tiene bastante claro el nivel intelectual de sus votantes. Nada de esto fue un error...
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