Cuarto trimestre, tercer cuatrimestre, segundo semestre, primer año y así hasta el infinito.

Escuchamos hoy a Dante Sica, que dice ser economista, expresar que el cuarto trimestre (ahora es el cuarto trimestre ja!) sera mejor y que en realidad ahora estábamos como en medio de una operación y veíamos sangre pero ya va a ver señora, todo mejorará. Fue tan optimista que hasta Ernesto Tenembaum se vio obligado a decirle "¿estas seguro que el medico esta recibido y no esta operando la parte sana?" Jaja, en fin, seria todo tan gracioso sino fuera trágico...
Hay que reconocer que si hay algo en lo que este gobierno no falla es en la comunicación. Parte de su estrategia es hacer creer lo contrario. Quieren hacernos creer a todos que no es que ellos, para defender el interés de la minoría a que pertenecen, perjudican a la mayoría, sino que las medidas que toman perjudican de modo ostensible a esa mayoría pero sólo transitoriamente, porque gracias a ellas luego gozaremos de las felicidades de las que gozábamos hace un año.
Lo curioso es la cara de ternero degollado de los que les creen. Que no son pocos.
La economía se destroza contra el desempleo, la inflación, la pérdida de subsidios y la caída de la actividad, mientras ellos especulan con lebacs y aumentan las ganancias de sus empresas subiendo los precios a la vez que desploman los salarios reales de sus empleados.
Pero todo esto lo comunican muy bien, haciendo creer que se trata de daños transitorios que redundarán en grandes beneficios futuros. Lo que no "comunican" es que esos beneficios son grandes, están en el futuro cercano, pero son para ellos, no para la mayoría de la gente.
Esta música ya la hemos oído muchas veces, y nunca terminó bien.