Quemando bosques en Chubut

El gobernador de Chubut Martín Buzzi anunció este lunes a la tarde una serie de medidas para frenar la “especulación inmobiliaria” a la que vinculó con los incendios desatados en la cordillera chubutense.
“Estamos en una situación actual que es muy compleja pero también hay que ponerle un punto final. Es cierto que enfrentamos una situación de incendios forestales pero también una situación donde gran parte son provocados de manera ex profeso. No es nuevo que en los veranos de la zona andino patagónica tengamos incendios provocados por los más diferentes motivos pero que tienen móviles internos”, dijo Buzzi. Comentó que “teneos cerca de 1000 focos distintos a lo largo de todo el verano, algunos prosperan y llegan como los de Cholila, El Pedregoso y Lago Puelo”.
“En gran parte, este negocio que vamos a atacar tiene que ver con históricos pobladores a los que el Estado les otorgó la tenencia precaria de la tierra porque hace 60 años están viviendo en el lugar y vienen de los pequeños inmigrantes que luego han venido a subdividirse a partir de familias e hijos y el Estado les ha otorgado el derecho de pastoreo a precio muy bajo, a dos pesos”, mencionó y amplió: “este poblador histórico nuestro le termina vendiendo la tierra a un argentino vivo, no a 2 pesos sino a 4 pesos. Ese argentino apiolado se la vende a un argentino o extranjero con plata, a 60 o a 100 mil dólares la hectárea. Es la situación que enfrentamos desde hace 20 años”, aseguró el gobernador.
"Ya no hace falta entregar la tierra de manera gratuita para que la gente venga. Lo voy a reemplazar por un Instituto de Regulación de Uso y Tenencia de la Tierra para el desarrollo y preservación que tienen que venir de la mano y tienen que ver con un plan de desarrollo territorial”.
Explicó que “estas medidas tienen que ver con el diálogo con la gente; vengo hace muchos años escuchando situaciones conflictivas, gente que vivió por 70 años en un lugar determinado y alguien con la tenencia precaria de la tierra que tienen ese pago le permite comprar dos camionetas e irse a vivir al pueblo pero esto vale millones de pesos después. Hay que ponerle un coto definitivamente desde el Estado, con las decisiones políticas correctas y hay que poner límite a las formas de especulación”.