domingo, 28 de noviembre de 2010

¿El país que no miramos o el que no nos muestran?

Lo que sucedió en Formosa viene sucediendo desde años ante el silencio desinteresado de los medios que ahora han decidido que el tema puede servir para esmerilar al gobierno.
Sucede entonces desde que los famosos commodities cotizan bien. La soja, los alimentos en general, ofrecen una rentabilidad tal que cualquier hijo de vecino contempla las grandes extensiones de tierra como un plazo fijo. Un terrenito cualquiera son 40.000 dolares por año y esta ocupado por unos pocos indios roñosos que no producen nada mas que para ellos. Con suerte.
En Salta, capital nacional del desmonte, hasta tienen un diputado famoso al que nada de esto le cuestionan y además los festejan porque el tipo da para personaje farandulesco y ligeramente disminuido intelectualmente lo que siempre ha producido, no se bien porque, comedia televisiva. Ricardo Buryaile (ruralista de CRA, UCR Formosa) otro diputado, puede dar cátedra sobre el tema. Justo en estos días su ex-complice Eduardo Buzzi lo relacionó con el apoderamiento de tierras por medio de la fuerza.
Esto no pasaba en 1999 donde no había tanto rendimiento económico en el campo fuera de la zona pampeana (donde los indios fueron masacrados muchos años antes, no se si alguien recuerda...) entonces era mejor que los indios roñosos se quedaran ahí en medio de la nada, no fuera cosa que se vinieran al pueblo. La ecuación cambio y ahora con el desmonte se pretende dejar a los aborígenes en islas apenas sustentables, en medio de las plantaciones, a la manera de las reservaciones indias norteamericanas. Justo es decirlo, no piensan en matarlos si aceptaran correrse por las buenas. Cosa que ya ha sucedido en toda la patria (Chaco, Salta, etc.) donde las comunidades aborígenes aceptaron (o perdieron, pero sin muertos, o mejor dicho, sin muertos ÚTILES a los intereses de la oposición) y están marginados y expulsados. En otros lugares, en parte los mapuches en el sur de Argentina y Chile, y ahora los Qom se resisten. Entonces los matan, los persiguen, les queman las casas, los atropellan autos misteriosamente en el marco de la relación privilegiada del poder económico con el politico (por si fueran diferentes) y la cana. Nada nuevo en la historia. Casi podríamos agradecer que aun no se han enterado de los métodos "amazónicos" para limpiar selva: Era común en Brasil que a las comunidades aborígenes media muertas por el hambre les llevaran comida envenenada. Y no paso hace tanto.
Incluso con buena leche alguien podría postular una discusión onda "Luna de Avellaneda": He aquí 4.000 hectáreas que pueden dar de comer a 15.000 argentinos... o seguir en manos de 300 que no muestran interés en producir nada. Hasta podría ser, sino hubiera de por medio guita y racismo, una linda discusión acerca de que es la comunidad, que es el estado, que es pertenecer a un país, una provincia, un municipio, una sociedad.
Por supuesto esta discusión esta velada. Entre el deseo de asignarle muertos al gobierno y las urgencias de la economía no hay lugar para el debate. Quizás, apenas, para la justicia.
¿Y el gobierno nacional no hace nada? No. Como con los sindicatos o las provincias los votantes de De La Rua o Cynthia Hotton o Patricia Bullrich dan consejos como si no tuvieran nada que ver y fueran politólogos de fuste. Le piden a Cristina que intervenga un sindicato o una provincia como si fuera una especie de broma la autonomía de los sindicatos o el federalismo. Ahora no vaya a Moreno a meterse con el precio de la nafta o la competencia desleal de Cablevisión porque ahí parece que hubiera dictadura.

8 comentarios:

Nando Bonatto dijo...

Este tema ,ausente incluso de la izquierda, movilizada justamente por la muerte de Mariano, pero semi borrada de estas, pareciera que la muerte tiene escalas de valor y un par de paisanos de la tierra valen poco
La policia de Isfran es una mierda racista,la quema de las pobrisimas propiedades de los tapes los pinta como lo que son ,perros de presa
¿Insfran?
Una mierda

Luis Quijote dijo...

"No hay mal que por bien no venga" reza la frase.

Siempre fue así en las provincias del norte, pero no era noticia.

Como ahora falta información catastrófica, se divulga.

Abrazos.

Ana C. dijo...

De verdad, si viene pasando desde hace años ¿Por qué el gobierno no hizo nada? ¿Tenía que esperar a que saliera en los diarios para enterarse?

Lic. Baleno dijo...

Escucho hablar de federalismo e independencia de la justicia Ana? Este es el unico gobierno que cree en las dos cosas no de la boca para afuera sino en acto.
Un tipo mata a otro y Cristina tiene que capturarlo, juzgarlo y condenarlo ahora? Lo que tienen que hacer las provincias es discutir que si quieren sembrar y recaudar alguien tiene que perder, o ser compensado, o alguna de las soluciones que la humanidad a encontrado en su historia.

desparejo dijo...

Baleno, estoy de acuerdo con ud. con respecto a todo lo que planteó y sobre todo a esa discusión como la que se da en la peli, que es de algún modo un poco diferente, la que plantea Correa en Ecuador. Sin embargo, lo que creo es que todo ese debate se puede dar, pero tomando como inaceptable que se mate. Lo mismo con la cuestión sindical. Si no reprimir fue una bandera hasta acá, hay que defenderla y algo fuerte, una muestra fuerte de autoridad de parte del PEN debe haber con respecto a esto. Creo que por lo menos en el ámbito sindical se está en condiciones de dar una vuelta de página en cierta forma violenta de acción. Lo que estaría bien sería que esto sirva para instalar esos debates que ud. plantea y el modo en que se ejerce la represeión sobre algunos sectores de la sociedad, que siempre son pobres. Saludos

Lic. Baleno dijo...

Claro, es una discusion que casi nunca se da en condiciones ideales. La guita que se pierde mientras discutis no la recuperas mas y eso en el capitalismo es el famosisimo "costo de oportunidad".

Daniela Godoy dijo...

Excelente post, son temas sobre los que se montan oportunistas, temas difíciles, temas complejos.
Me parece que para maniobrar desde la sociedad a través de concientización sobre la tragedia constante de los pueblos originarios, y así torcer la relación de fuerzas, hay que tener cuidado y documentarse bien.Jamás se puede olvidar ni tolerar el asesinato.
Hablar de estos temas es hablar de la sojería. Hablar de intervención es delicado, por respeto al federalismo. Debe haber una vía judicial limpia que permita roer la connivencia entre patrones feudales represores y gobiernos provinciales, sin alterar la autonomía.
SAludos

guille dijo...

De acuerdo baleno.