Algo mas sobre inflación y mi abuela Irene

En tiempos de neologismos, Artemio, el Grupo Ahhh tomó como bandera la reducción de subsidios como forma de control de la inflación. Es una variante de las viejas recetas de ajuste que hemos padecido entre 1976-2002.
La receta del ajuste dice mas o menos asi: Mi abuela Irene tiene ingresos por $800 y gasta $100 en servicios y $700 en bienes. Si los servicios aumentan 20% tendrá sólo $680 para gastar en bienes. La venta de bienes bajará y, dice la economía clásica, la neoliberal, la conservadora y la del radicalismo, los bienes deberán bajar de precios.
Es un buen ejemplo de como una perfecta lógica economicista elude la realidad. Los economistas populistas (tan denostados) encontraron que la realidad metía la cola y pasaba esto:

• Mi abuela Irene, en realidad, tenía ingresos por $800, gastaba $100 en servicios y $600 en bienes y ahorraba $100. Puede dejar de ahorrar para seguir gastando lo mismo. Y los precios no bajan.

• Mi abuela Irene gastaba 100 y 700, pero tenía ahorrados bajo el colchón 10.000 Boden 2012 de un juicio por reajustes que el Anses (ahora que es nacional y popular) paga. Sin destinos de inversión para sus bonos (la inseguridad jurídica del gobierno montonero digamos...), puede usar sus ahorros a mantener su nivel de vida. Y no sólo eso, mi abuela Irene se comió la hiper de Alfonsin y si aumenta el azúcar compra el doble para prevenir aumentos futuros. El resultado: Mi abuela Irene consume MAS y los precios no solo no bajan sino que suben.

• Mi abuela Irene no tiene ahorros, pero el productor de bienes en vez de bajar los precios decide mantener el precio y exportar los excedentes a un país próspero como Uruguay o Chile que son mas mejores. ¿Y porque va a bajar los precios acá? Es mas, es posible que los suba para tener mas saldo exportable.
  

• Mi abuela Irene no tiene ahorros y el productor de bienes no puede exportar porque Moreno no lo deja o porque en Uruguay no quieren lo que el vende pero prefiere mantener el precio aún perdiendo volumen porque piensa que va a aguantar mas el, ganando menos, que el gobierno la presión social. Y los precios no bajan.
  

Conclusión: Con un aumento de los servicios (vía quita de subsidios o cualquier otra) tenés un seguro aumento de ese costo y una sólo probable (¿Y cuan probable?) disminución de los otros.