Salsa

El Instituto Verificador de Circulaciones (I.V.C.) es un organismo privado sostenido por los diarios que le pagan para que verifique sus ventas. Los diarios quieren que sus ventas sean verificadas por un organismo al que ellos mismos mantienen para poder vender publicidad en el nicho de mercado acordado entre los medios que mantienen al organismo que los tiene que medir para que ellos puedan tener una tarifa de publicidad de acuerdo a sus ventas. Ventas que son auditadas por el organismo que ellos mismos financian. Lo que entendiste es lo que es.
El IVC no tiene fines de lucro. No se rían. Lo dicen ellos. Creen que tener "una fuente de información fidedigna que permita pautar publicidad en medios gráficos" no es tener fines de lucro sino una de las formas del altruismo. Ellos son así, se cagan en la semántica.
Inflar las cifras tiene la ventaja, entonces, de vender publicidad por una inserción mayor a la real. Además de funcionar como apriete a políticos, sindicalistas y empresarios con el verso de que la gente vota cuando compra el diario. Pero cuando hay que pagar Ingresos Brutos, IVA y alguna cosilla mas, es mejor que se vote poco.
Por eso, y no por otra cosa, es que hoy Clarín (ojo, es un .pdf) y La Nación publican una noticia sobre publicidad oficial donde los datos de sus tiradas son sensiblemente mas bajos que los que difunde su "organización sin fines de lucro". Clarín dijo de sí mismo que vende un promedio de 251.543 ejemplares, cuando según el IVC su promedio en enero fue mayor: 297.994. Afirmó que La Nación vende un promedio de 119.472 ediciones, cuando según el IVC alcanza los 157.195.

Ámbito Financiero hoy les dio un poco de su propia salsa.