domingo, 2 de abril de 2017

Wannabe

"Yo soy democratica y buena ¿Y vos?"
El término anglosajón wannabe hace referencia a una persona que quiere aparentar ser otra, imitar actitudes o incluso desear ser otra. 
El término, una contracción de want to be (en inglés, «querer ser»), entró a formar parte del lenguaje popular de los Estados Unidos a mediados de los años 80. Fue usado por primera vez el 6 de julio de 1981 en un artículo de la revista Newsweek sobre surfing, que describía a los surfistas novatos que abarrotaban las playas como wannabes («I wanna be a surfer»).
El término fue popularizado por el escritor John Skow en un ejemplar de la revista Time de la primavera de 1985 sobre la estrella pop Madonna. Skow usó la frase Wanna Be's para describir a los fanáticos ansiosos que anhelaban vestirse, hablar y comportarse como su ídolo.

Hace muchos años les llamabamos "snobs" (pronunciese esnob) que es un latinismo derivado de la palabra «snob», contractura de la expresión latina «sine nobilitate» que significaba «sin nobleza», con el cual se denomina a una persona que imita con afectación las maneras, opiniones, etc. de aquellos a quienes considera distinguidos o de clase social alta para aparentar ser igual que ellos.
Deseosos de pertenecer a la élite, los snobs tienden a reproducir el comportamiento de una clase social o intelectual a la que consideran superior.
Muchas veces imitan las características de esta clase, ya sea en el lenguaje, los gustos, las modas y estilos de vida. Al mismo tiempo tratan con desprecio a los que consideran inferiores. Esta forma de mimetismo social, definida por primera vez por William Makepeace Thackeray, fue analizada por sociólogos como Thorstein Veblen o Norbert Elias.

Algunas de sus características:
1.Suelen detestar gran parte de su vida y por eso intentan en la medida de lo posible conseguir intoxicar a los demás.
 2.Se llevan francamente mal con alguien que si esté satisfecho.
 3.Son fáciles de detectar porque no son personas frías, ni en general tampoco tienen malos sentimientos. Pero están tremendamente frustradas y la frustración conduce a la agresión, que se manifiesta de muy distintas formas.
4.Están atormentados por las decisiones que han tomado, quizás impuestas desde afuera sin haber deseado esa elección. Mantienen una relación de conflicto psíquico con este tipo de eventos de su vida.
5.Quieren justificar la trayectoria de su vida desacreditando la vida de otros.
6.Hablan de personas y no de ideas.
7.Opinan de los demás no desde un prisma global que pueda hacer entender tanto los fallos y aciertos cometidos por esa persona. Juzgan basándose en heurísticos que los anclan en el reduccionismo, la simpleza y la subjetividad.
8.Suelen expresar unos valores que no son usados por ellos sino para juzgar a los demás de forma continuada.
9.Son muy poco autocríticos con lo que ellos realizan. No les gusta sentirse juzgados.
10.Se irritan con facilidad.
11.Los éxitos de los demás se deben a causas externas, inestables y específicas, y los suyos a causas internas, estables e inespecíficas a la situación.
12.Sus juicios pueden ser desde leves y privados; a públicos y peligrosos.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Don Arturo Jauretche los llamaba "medio pelo" o "tilingos"

Saludos

Anónimo dijo...

para mayor desarrollo vease el medio pelo en la sociedad argentina de don arturo jauretche

Q dijo...

En castellano antiguo serian los que cagan mas alto de lo que el culo les da.