Dieciocho metros cuadrados de madera de pino (la mas barata). Eso es a lo que la organización Techo (ex Un Techo para mi país") le llama casa (el baño te lo debo). Las casas no se regalan sino que se venden a los pobres para que, según la explicación de la entidad, "los pobres entiendan el valor del sacrificio". Obviamente, nosotros, gente de clase media podemos paternal y didacticamente indicarles a los pobres lo que es el sacrificio porque hemos sufrido muchisimo para tener nuestra casa. No como ellos.
Delicias de la caridad que uno puede obtener donando unos pesos. Pero no queda ahí la satisfacción moral, también puede deducir unos mangos del impuesto a las ganancias y evitar que los políticos se lo roben o, peor, lo utilicen en planes sociales.
CÓMO DEDUCIR DEL IMPUESTO A LAS GANANCIAS MI APORTE A TECHO
"Aunque acotados, existen incentivos fiscales para las donaciones de personas. Los montos de dinero cedidos pueden deducirse de la base imponible del impuesto a las ganancias, con límites y cumpliendo varios requisitos. Lo que se declara queda sujeto al control por parte de la AFIP, que recibe información de lo que recauda cada entidad.
Sólo se computa como deducción una cifra tal que no supere el 5% de la utilidad bruta del año. Por ejemplo, si una persona que percibe un salario mensual de $ 15.000 (y no tiene ningún otro ingreso/egreso), neto de aportes ($ 195.000 anuales contando el aguinaldo), dona $ 12.000, entonces de la base imponible se descontarán $ 9750, que es el 5% de su sueldo después de descuentos."
3 comentarios:
Techo Choto y construido por voluntarios
Algo le habia dicho Evita a a las Damas de La Beneficiencia hace 60 ños, paso el tiempo y nada cambio.
Techo uno, techo dos, techo tres...
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